En los últimos años, la incineración ha ganado terreno frente a los entierros tradicionales en Cataluña, convirtiéndose en la opción preferida para la mayoría de las familias. Según un artículo reciente de El Periódico de Cataluña, más del 60% de los fallecidos en la comunidad son incinerados, una cifra que no ha dejado de crecer desde hace varias décadas. Este cambio refleja no solo una transformación cultural, sino también la respuesta a nuevos desafíos sociales y económicos.
1. Razones del aumento de la incineración
Diversos factores explican por qué cada vez más personas en Cataluña optan por la incineración en lugar del entierro tradicional. Entre ellos destacan:
- Espacio limitado en los cementerios: Cataluña, al igual que muchas otras regiones de Europa, enfrenta una escasez de espacio en los cementerios, lo que ha incrementado los costes de los entierros. La incineración se presenta como una alternativa más práctica y económica para muchas familias.
- Factores económicos: El entierro tradicional suele implicar costos más elevados, incluyendo el mantenimiento de una tumba a largo plazo. La incineración, en cambio, puede resultar más accesible económicamente, lo que ha llevado a muchas familias a elegir esta opción.
- Cambio en las preferencias culturales y religiosas: Históricamente, el entierro ha sido la opción más común en sociedades de tradición cristiana. Sin embargo, en las últimas décadas, la incineración ha dejado de estar mal vista por la mayoría de las confesiones religiosas, lo que ha permitido que más personas opten por esta opción sin connotaciones negativas.
2. Ventajas medioambientales
Otro de los motivos por los que la incineración ha ganado popularidad es el creciente interés por reducir el impacto ambiental de los ritos funerarios. Los entierros tradicionales implican el uso de terrenos, materiales para la construcción de féretros y el mantenimiento de cementerios, lo que genera un impacto en el entorno natural.
La incineración, por su parte, presenta una huella ecológica menor, aunque también tiene sus desafíos. Para muchas personas concienciadas con el medio ambiente, optar por una urna biodegradable o esparcir las cenizas en un entorno natural se ha convertido en una forma de dar un último adiós de manera más respetuosa con el planeta.
3. La evolución de los servicios funerarios
El auge de la incineración también ha impulsado la evolución en la oferta de servicios funerarios. Hoy en día, muchas empresas especializadas en el sector han ampliado su catálogo de opciones para adaptarse a las nuevas tendencias. Desde columbarios hasta jardines para el esparcimiento de cenizas, las alternativas son diversas y buscan ofrecer a las familias la posibilidad de elegir el adiós que mejor se adapte a sus necesidades y deseos.
En Cataluña, ciudades como Barcelona han visto cómo se multiplican las opciones para aquellos que eligen la incineración, con instalaciones modernas y espacios dedicados exclusivamente a la memoria de los incinerados.
4. Perspectivas futuras
La tendencia hacia la incineración no parece detenerse, y todo indica que seguirá en aumento en los próximos años. Con una sociedad cada vez más urbanizada y consciente de la sostenibilidad, es probable que esta opción continúe ganando popularidad.
Además, los servicios asociados a la incineración, como los columbarios prefabricados o los espacios memoriales, seguirán evolucionando para satisfacer la creciente demanda. Las empresas funerarias, como Iemer, ya ofrecen soluciones especializadas en este campo, adaptándose a las nuevas tendencias del mercado.
Conclusión
La incineración se ha consolidado como la opción preferida frente a los enterramientos tradicionales en Cataluña. Factores como la falta de espacio en los cementerios, los costos asociados y las preocupaciones medioambientales han impulsado este cambio en las preferencias funerarias. Con una oferta cada vez más variada de servicios para incineraciones, la sociedad catalana sigue adaptándose a las nuevas realidades, mientras honra la memoria de los fallecidos de una manera más moderna y sostenible.